un trabajo interesante de la Red IBERFORMAT y el Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación de España.
http://www.oei.es/revistacultura/secc_05/secc_05_5/pdf/print.pdf
viernes, 12 de diciembre de 2008
Los gestores culturales andaluces proponen un código deontológico
Esta es una buena noticia, y me viene a la mente los años de atraso en México en cuanto a profesionalización y aún más en legislación en la Gestión Cultural, ya quisiera que una institución cultural, secretaría o instituto de cultura solicitaran gestores culturales para sus puestos ja... Y si hablamos de investigación e indicadores culturales podría ponerme a llorar…
En hora buena por los andaluces, esta noticia es del diariodesevilla.es
La asociación GECA presenta hoy en Toledo, en el marco de un congreso sobre el sector, un decálogo para la regulación de la profesión que evite el "intrusismo"
Los gestores culturales andaluces, representados en la asociación GECA que integran unos 200 profesionales, propondrán hoy en el Congreso La profesionalización de la Gestión Cultural en el marco europeo, que desde ayer y hasta el próximo sábado se celebra en Toledo, un código deontológico que regule la profesión en toda España. La ponencia, leída por Pedro J. González, coordinador de GECA y jefe de Sección de Coordinación del Instituto de la Cultura y las Artes de Sevilla, incide, sobre todo, en el valor de "una profesión tan extendida en los últimos años como poco regulada", que desarrollan su labor como "reinos de Taifas". El valor del gestor cultural consiste en "promocionar la producción y realización cultural con equilibrio, ya que estamos en medio de artistas, diferentes patrocinadores, diversas entidades colaboradoras y el público, que puede demandar diferentes formas de actuación" y que tiene en sus manos la tarea de "equilibrar la conservación de lo tradicional y lo festivo con la innovación emprendedora de la cultura".Según González, también profesor de los másters e gestión cultural que se imparten en las Universidades de Sevilla, Granada y Salamanca, los problemas de esta profesión son "el acoso laboral, la falta de formación y el intrusismo", ya que muchas de las personas que están ejerciendo de gestores culturales "no tienen preparación ninguna" porque "con frecuencia son cargos políticos designados arbitrariamente", en el caso de los gestores culturales públicos, que además "tienen unas circunstancias diferentes" en su trabajo diario que los gestores privados, que pueden "centrar mucho más sus líneas de actuación".Ésta es una de las razones por la que desde GECA se ha promovido una "regulación ética" del ejercicio de las funciones a nivel estatal que acabe con "la falta de planificación" que hoy acusan las administraciones, tanto privadas como públicas, según González. El gestor cultural es aquel que busca un "equilibrio entre obligatoriedad, interés general y libertad", enumera el coordinador del ICAS, que asume que en la Administración Pública parte de las trabas en el desarrollo de las funciones de un gestor cultural vienen dadas por el "freno a las críticas" que "desde dentro" establecen gobernantes y políticos. En este sentido, González considera que el principal problema de la política cultural andaluza es querer ser juez y parte, es decir, "su presencia en todos los ámbitos de la Cultura". Según el vocal de GECA, que Junta, Diputación o Ayuntamiento quieran estar presentes en la "creación, difusión y consumo" de la cultura es "una locura" porque "no hay dinero para tanto" por lo que es necesario "priorizar las necesidades y los ámbitos de actuación" y saber "intermediar con conocimiento entre los diferentes agentes sociales, culturales y económicos". Esta ubicuidad de los poderes públicos, dice el gestor sevillano, crea una "competencia desleal. No tiene sentido apoyar iniciativas privadas para la creación de nuevos espacios escénicos y ser titular de teatros públicos", resume.La propuesta presentada por GECA, que será estudiada por el resto de federaciones y asociaciones de gestores, trata de enumerar "una serie de buenas prácticas y modos de actuación" para tratar de solventar problemas "enquistados" en el ejercicio de una profesión sin la que no se entiende el crecimiento cultural de cualquier sociedad.
En hora buena por los andaluces, esta noticia es del diariodesevilla.es
La asociación GECA presenta hoy en Toledo, en el marco de un congreso sobre el sector, un decálogo para la regulación de la profesión que evite el "intrusismo"
Los gestores culturales andaluces, representados en la asociación GECA que integran unos 200 profesionales, propondrán hoy en el Congreso La profesionalización de la Gestión Cultural en el marco europeo, que desde ayer y hasta el próximo sábado se celebra en Toledo, un código deontológico que regule la profesión en toda España. La ponencia, leída por Pedro J. González, coordinador de GECA y jefe de Sección de Coordinación del Instituto de la Cultura y las Artes de Sevilla, incide, sobre todo, en el valor de "una profesión tan extendida en los últimos años como poco regulada", que desarrollan su labor como "reinos de Taifas". El valor del gestor cultural consiste en "promocionar la producción y realización cultural con equilibrio, ya que estamos en medio de artistas, diferentes patrocinadores, diversas entidades colaboradoras y el público, que puede demandar diferentes formas de actuación" y que tiene en sus manos la tarea de "equilibrar la conservación de lo tradicional y lo festivo con la innovación emprendedora de la cultura".Según González, también profesor de los másters e gestión cultural que se imparten en las Universidades de Sevilla, Granada y Salamanca, los problemas de esta profesión son "el acoso laboral, la falta de formación y el intrusismo", ya que muchas de las personas que están ejerciendo de gestores culturales "no tienen preparación ninguna" porque "con frecuencia son cargos políticos designados arbitrariamente", en el caso de los gestores culturales públicos, que además "tienen unas circunstancias diferentes" en su trabajo diario que los gestores privados, que pueden "centrar mucho más sus líneas de actuación".Ésta es una de las razones por la que desde GECA se ha promovido una "regulación ética" del ejercicio de las funciones a nivel estatal que acabe con "la falta de planificación" que hoy acusan las administraciones, tanto privadas como públicas, según González. El gestor cultural es aquel que busca un "equilibrio entre obligatoriedad, interés general y libertad", enumera el coordinador del ICAS, que asume que en la Administración Pública parte de las trabas en el desarrollo de las funciones de un gestor cultural vienen dadas por el "freno a las críticas" que "desde dentro" establecen gobernantes y políticos. En este sentido, González considera que el principal problema de la política cultural andaluza es querer ser juez y parte, es decir, "su presencia en todos los ámbitos de la Cultura". Según el vocal de GECA, que Junta, Diputación o Ayuntamiento quieran estar presentes en la "creación, difusión y consumo" de la cultura es "una locura" porque "no hay dinero para tanto" por lo que es necesario "priorizar las necesidades y los ámbitos de actuación" y saber "intermediar con conocimiento entre los diferentes agentes sociales, culturales y económicos". Esta ubicuidad de los poderes públicos, dice el gestor sevillano, crea una "competencia desleal. No tiene sentido apoyar iniciativas privadas para la creación de nuevos espacios escénicos y ser titular de teatros públicos", resume.La propuesta presentada por GECA, que será estudiada por el resto de federaciones y asociaciones de gestores, trata de enumerar "una serie de buenas prácticas y modos de actuación" para tratar de solventar problemas "enquistados" en el ejercicio de una profesión sin la que no se entiende el crecimiento cultural de cualquier sociedad.
jueves, 11 de diciembre de 2008
inconcsiente cultural
Toda educación tiende a incorporar en hábito subconsciente
¨ las lentas adquisiciones de una disciplina hereditaria.
Alfonso Reyes¨
Todo pueblo necesita educación. La educación lleva al desarrollo social y económico. Un pueblo educado necesita de la expresión cultural para rehacerse e identificarse. En el discurso de los románticos alemanes, Kultur representa los valores, significados, signos lingüísticos y símbolos compartidos por un pueblo. Kultur se refiere a formas de expresión a través de las cuales se expresa el “espíritu” de un pueblo. Según esta perspectiva, la adquisición individual de cultura requiere del aprendizaje de los valores colectivos por medio de la educación. La cultura es el único modo de mantener vivo el espíritu y la imaginación de un pueblo cualquiera. No intentaré establecer un concepto de lo que es cultura, pero para este somero análisis del inconciente cultural y desarrollo económico y social de un Estado o región, me limitaré a utilizar el término cultura como: las estructuras de significación colectiva y conjunto de rasgos distintivos, espirituales, materiales y afectivos que caracterizan a una sociedad o grupo social.
Un pueblo sin educación es estéril y por ello la gestión cultural sería innecesaria, por que bastaría con una gestión mercadológica que presentaría a la “cultura” como un espectáculo de circo nunca realmente autentico ya que la cultura de masas no es ni educativa ni trasformadora, es mero entretenimiento. La calidad cultural depende de la educación, así como la oferta y demanda cultural dependen del nivel de educación de la población.
Son muchas las formas como la cultura se convierte en un agente de desarrollo social. Especialmente cuando crea una ¨ conciencia cultural ¨, termino usado por la escuela estructuralista y que hasta la fecha describe perfectamente el desarrollo de estos procesos. Por ejemplo cuando un evento cultural como una obra de teatro conmueve a las personas, más allá de impresionarlas o divertirlas, es decir, cuando la cultura mueve sentimientos convierte al espectador en participe directo y creador que con el tiempo se convertirá en un demandante selectivo. Además, de la creación de espacios de identidad cultural como campos de encuentro, formativos y críticos. Así un grupo de personas de diversos sectores de la población pueden no estar de acuerdo en un tema en particular, pero por lo menos están de acuerdo en discutir en torno a los mismos temas, reflexiones que los convierten en pensadores que participan de su sociedad y su época, reforzando así su el sentido de identidad y ciudadanía de comunidad. Esto gracias al inconsciente cultural que se debe a sus aprendizajes culturales.
Con todo esto, la cultura se convierte es una expresión que proviene del pueblo y se traduce cuantitativamente dentro de los indicadores pertenecientes al desarrollo económico principalmente y social gradualmente. Es importante hacer énfasis en la inclusión de los diversos sectores de la sociedad para nutrir el sentido distintivo de la cultura de significación colectiva y libertad.
¨ las lentas adquisiciones de una disciplina hereditaria.
Alfonso Reyes¨
Todo pueblo necesita educación. La educación lleva al desarrollo social y económico. Un pueblo educado necesita de la expresión cultural para rehacerse e identificarse. En el discurso de los románticos alemanes, Kultur representa los valores, significados, signos lingüísticos y símbolos compartidos por un pueblo. Kultur se refiere a formas de expresión a través de las cuales se expresa el “espíritu” de un pueblo. Según esta perspectiva, la adquisición individual de cultura requiere del aprendizaje de los valores colectivos por medio de la educación. La cultura es el único modo de mantener vivo el espíritu y la imaginación de un pueblo cualquiera. No intentaré establecer un concepto de lo que es cultura, pero para este somero análisis del inconciente cultural y desarrollo económico y social de un Estado o región, me limitaré a utilizar el término cultura como: las estructuras de significación colectiva y conjunto de rasgos distintivos, espirituales, materiales y afectivos que caracterizan a una sociedad o grupo social.
Un pueblo sin educación es estéril y por ello la gestión cultural sería innecesaria, por que bastaría con una gestión mercadológica que presentaría a la “cultura” como un espectáculo de circo nunca realmente autentico ya que la cultura de masas no es ni educativa ni trasformadora, es mero entretenimiento. La calidad cultural depende de la educación, así como la oferta y demanda cultural dependen del nivel de educación de la población.
Son muchas las formas como la cultura se convierte en un agente de desarrollo social. Especialmente cuando crea una ¨ conciencia cultural ¨, termino usado por la escuela estructuralista y que hasta la fecha describe perfectamente el desarrollo de estos procesos. Por ejemplo cuando un evento cultural como una obra de teatro conmueve a las personas, más allá de impresionarlas o divertirlas, es decir, cuando la cultura mueve sentimientos convierte al espectador en participe directo y creador que con el tiempo se convertirá en un demandante selectivo. Además, de la creación de espacios de identidad cultural como campos de encuentro, formativos y críticos. Así un grupo de personas de diversos sectores de la población pueden no estar de acuerdo en un tema en particular, pero por lo menos están de acuerdo en discutir en torno a los mismos temas, reflexiones que los convierten en pensadores que participan de su sociedad y su época, reforzando así su el sentido de identidad y ciudadanía de comunidad. Esto gracias al inconsciente cultural que se debe a sus aprendizajes culturales.
Con todo esto, la cultura se convierte es una expresión que proviene del pueblo y se traduce cuantitativamente dentro de los indicadores pertenecientes al desarrollo económico principalmente y social gradualmente. Es importante hacer énfasis en la inclusión de los diversos sectores de la sociedad para nutrir el sentido distintivo de la cultura de significación colectiva y libertad.
jueves, 4 de diciembre de 2008
Maestría en Promoción y Desarrollo Cultural
Si pasan cosas en el norte del país...
La Universidad Autónoma de Coahuila en coordinación con Consejo Nacional para la Cultura y las ArtesInstituto Coahuilense de Cultura Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superiory Distance Educational Network
Extiende la más cordial invitación para integrar el grupo 2009 - 2010 de la Maestría en Promoción y Desarrollo Culturalen su cuarta edición.
Extiende la más cordial invitación para integrar el grupo 2009 - 2010 de la Maestría en Promoción y Desarrollo Culturalen su cuarta edición.
Informes e Inscripción http://www.uadec.dednet.net/institucion/uadec/publico/maestria
viernes, 28 de noviembre de 2008
De esto es de los que estoy hablando
Articulo de Milenio.com
viernes 28 de noviembre del 2008
Frank Lozano
Al quite
La gestión cultural ha sido una odisea en la que promotores, artistas y la propia burocracia cultural, descienden cotidianamente a los vastos infiernos de lo imposible. Forjados en el heroísmo, los promotores culturales empuñan como arma única la intención de contribuir al mejoramiento de la calidad de vida de la gente, desde una visión del desarrollo social que se pertrecha en la cultura como un instrumento intrínseco de transformación de la realidad.
Normalmente, el tránsito por dichos infiernos expone una serie de deficiencias que en muchas ocasiones determinan el futuro de los proyectos que se pretenden realizar. Por el lado de las burocracias culturales, la principal debilidad consiste en su apego por lo inmediato. Alejados de una visión de largo plazo, los burócratas se concentran en desahogar una agenda del aquí y del ahora.
En complicidad con promotores urgidos de ver sus proyectos realizados, dan curso a ideas e iniciativas con fecha de caducidad. Esta adolescencia de visión forja diversos vicios: la gestión se transforma en trámite; el desarrollo cultural, en actividades culturales; el desarrollo social, en entretenimiento; las empresas culturales, en cerillas que se queman tras el chispazo inicial.
De un tiempo para acá han surgido iniciativas no lucrativas de parte de artistas y promotores que decidieron asociarse con la intención de pasar de lo inmediato a lo mediato y de éste a una visión de largo aliento que transforme, no sólo la relación de los artistas, grupos y promotores con las burocracias culturales, sino también las propias prácticas de gestión empleadas por ellos mismos, que perpetraban el vicio de producir para el aquí y el ahora.
Es así como surgen organizaciones culturales como Tomarte, que iniciaron Scott Neri y Juan Carlos Uribe, y Cultura en Red, encabezada por la periodista y promotora cultural Jade Ramírez, y por la investigadora Gloria Pérez, entre otras muchas iniciativas. A esta visión se suma ahora el proyecto Las Encantadas, comandado por Lola Díaz y Carlos López de Alba.
Estos y otros grupos tienen en común la claridad de saber que la gestión cultural requiere de diversas herramientas, tanto tecnológicas como de formación, vinculación, asociacionismo, organización, capacitación y sobre todo de ruptura de paradigmas, para lograr el éxito en sus proyectos.
Para la gestión cultural, resulta saludable y oxigenante la aparición de actores que establezcan un modo distinto de interlocución, que replanteen la interacción entre autoridades y promotores desde una lógica distinta. Tristemente, quienes tendrían que fungir como los guías en el proceso de profesionalización de la gestión cultural se muestran incapaces de transformar su visión, su estructura y sus prácticas administrativas, para acompañar a promotores y artistas en su peregrinar.
Tanto el estado, como los municipios de Jalisco son rehenes de inercias burocráticas. La comodidad de las prácticas ha creado una confortable hamaca donde se mecen unos y otros bajo el amparo de que la gestión cultural no es alcanzada por la lupa escrupulosa de los medios. De ahí que mientras existan organizaciones e iniciativas que le entren al quite en desinstalar los vicios y prácticas de gestión lesivas, habrá que aplaudirlo y apoyarlo. El confort de la burocracia debe terminar.
franklozano_dr@yahoo.com.mx
viernes 28 de noviembre del 2008
Frank Lozano
Al quite
La gestión cultural ha sido una odisea en la que promotores, artistas y la propia burocracia cultural, descienden cotidianamente a los vastos infiernos de lo imposible. Forjados en el heroísmo, los promotores culturales empuñan como arma única la intención de contribuir al mejoramiento de la calidad de vida de la gente, desde una visión del desarrollo social que se pertrecha en la cultura como un instrumento intrínseco de transformación de la realidad.
Normalmente, el tránsito por dichos infiernos expone una serie de deficiencias que en muchas ocasiones determinan el futuro de los proyectos que se pretenden realizar. Por el lado de las burocracias culturales, la principal debilidad consiste en su apego por lo inmediato. Alejados de una visión de largo plazo, los burócratas se concentran en desahogar una agenda del aquí y del ahora.
En complicidad con promotores urgidos de ver sus proyectos realizados, dan curso a ideas e iniciativas con fecha de caducidad. Esta adolescencia de visión forja diversos vicios: la gestión se transforma en trámite; el desarrollo cultural, en actividades culturales; el desarrollo social, en entretenimiento; las empresas culturales, en cerillas que se queman tras el chispazo inicial.
De un tiempo para acá han surgido iniciativas no lucrativas de parte de artistas y promotores que decidieron asociarse con la intención de pasar de lo inmediato a lo mediato y de éste a una visión de largo aliento que transforme, no sólo la relación de los artistas, grupos y promotores con las burocracias culturales, sino también las propias prácticas de gestión empleadas por ellos mismos, que perpetraban el vicio de producir para el aquí y el ahora.
Es así como surgen organizaciones culturales como Tomarte, que iniciaron Scott Neri y Juan Carlos Uribe, y Cultura en Red, encabezada por la periodista y promotora cultural Jade Ramírez, y por la investigadora Gloria Pérez, entre otras muchas iniciativas. A esta visión se suma ahora el proyecto Las Encantadas, comandado por Lola Díaz y Carlos López de Alba.
Estos y otros grupos tienen en común la claridad de saber que la gestión cultural requiere de diversas herramientas, tanto tecnológicas como de formación, vinculación, asociacionismo, organización, capacitación y sobre todo de ruptura de paradigmas, para lograr el éxito en sus proyectos.
Para la gestión cultural, resulta saludable y oxigenante la aparición de actores que establezcan un modo distinto de interlocución, que replanteen la interacción entre autoridades y promotores desde una lógica distinta. Tristemente, quienes tendrían que fungir como los guías en el proceso de profesionalización de la gestión cultural se muestran incapaces de transformar su visión, su estructura y sus prácticas administrativas, para acompañar a promotores y artistas en su peregrinar.
Tanto el estado, como los municipios de Jalisco son rehenes de inercias burocráticas. La comodidad de las prácticas ha creado una confortable hamaca donde se mecen unos y otros bajo el amparo de que la gestión cultural no es alcanzada por la lupa escrupulosa de los medios. De ahí que mientras existan organizaciones e iniciativas que le entren al quite en desinstalar los vicios y prácticas de gestión lesivas, habrá que aplaudirlo y apoyarlo. El confort de la burocracia debe terminar.
franklozano_dr@yahoo.com.mx
La razón del blog
Los proyectos en Gestión Cultural en el norte de México son prácticamente inexistente. Hasta hace pocos años los gobiernos estatales se dieron la tarea de proyectar dentro de sus programas de gobierno, a la cultura como un eje principal para el desarrollo sustentable.
Sin embargo, los proyectos de gobierno carecen de la estructura, indicadores, proyección, evaluación y programas de procuración de fondos que garanticen su continuidad a través y a pesar de los cambios administrativos y gubernamentales propios de estas instituciones. Debido a la falta de planeación, dichos programas carecen de vínculos con Universidades, Asociaciones Civiles e iniciativa privada. Sin embargo existen diversos programas de algunas empresas socialmente responsables que tienen el interés y los recursos para financiar proyectos de desarrollo cultural.
Debido a todas estas características visualizo una gran oportunidad para la creación de empresas, industrias y servicios culturales en donde el patrimonio artístico pueda ser aprovechado en los procesos de formación de riqueza activando la economía y el turismo, proporcionando así una mejor calidad de vida para la ciudadanía.
Uno de los principales motivos de la carencia de proyectos y empresas culturales en el norte del país es la falta de profesionales que puedan administrar y gestionar proyectos culturales viables y eficientes que cubran con las amplias necesidades de la sociedad. Por ejemplo, para un puesto de Subdirector de planeación y contenidos en la Secretaría de Educación Pública con un sueldo mensual de $25,254.76 pesos, (aproximadamente €1.578) encargado de planear y coordinar la elaboración de los programas de actividades culturales y las líneas de investigación en museos, en el Diario Oficial de la Federación se solicitan egresados de las licenciaturas en Contaduría, Administración, Ciencias Sociales y Antropología. Para el empleo de Director de Paseos Culturales en el Instituto Nacional de Antropología e Historia con un sueldo mensual de $47, 890.93 pesos (aproximadamente €2.993) encargado de programar y organizar paseos culturales para la promoción y difusión de proyectos culturales y del patrimonio cultural de la nación, se solicitan egresados de las carreras en Mercadotecnia, Comercio, Relaciones Internacionales, Administración y Ciencias Políticas y Administración pública.
En este blog espero compartir mis experiencias en cuanto a Gestión Cultural en México y mi anhelo de obtener las herramientas y el conocimiento para poder trabajar en proyectos culturales que ayuden en el desarrollo sustentable de del país. Y si sigo soñando con irme a España a estudiar gestión cultural y socioanimación cultural.
Sin embargo, los proyectos de gobierno carecen de la estructura, indicadores, proyección, evaluación y programas de procuración de fondos que garanticen su continuidad a través y a pesar de los cambios administrativos y gubernamentales propios de estas instituciones. Debido a la falta de planeación, dichos programas carecen de vínculos con Universidades, Asociaciones Civiles e iniciativa privada. Sin embargo existen diversos programas de algunas empresas socialmente responsables que tienen el interés y los recursos para financiar proyectos de desarrollo cultural.
Debido a todas estas características visualizo una gran oportunidad para la creación de empresas, industrias y servicios culturales en donde el patrimonio artístico pueda ser aprovechado en los procesos de formación de riqueza activando la economía y el turismo, proporcionando así una mejor calidad de vida para la ciudadanía.
Uno de los principales motivos de la carencia de proyectos y empresas culturales en el norte del país es la falta de profesionales que puedan administrar y gestionar proyectos culturales viables y eficientes que cubran con las amplias necesidades de la sociedad. Por ejemplo, para un puesto de Subdirector de planeación y contenidos en la Secretaría de Educación Pública con un sueldo mensual de $25,254.76 pesos, (aproximadamente €1.578) encargado de planear y coordinar la elaboración de los programas de actividades culturales y las líneas de investigación en museos, en el Diario Oficial de la Federación se solicitan egresados de las licenciaturas en Contaduría, Administración, Ciencias Sociales y Antropología. Para el empleo de Director de Paseos Culturales en el Instituto Nacional de Antropología e Historia con un sueldo mensual de $47, 890.93 pesos (aproximadamente €2.993) encargado de programar y organizar paseos culturales para la promoción y difusión de proyectos culturales y del patrimonio cultural de la nación, se solicitan egresados de las carreras en Mercadotecnia, Comercio, Relaciones Internacionales, Administración y Ciencias Políticas y Administración pública.
En este blog espero compartir mis experiencias en cuanto a Gestión Cultural en México y mi anhelo de obtener las herramientas y el conocimiento para poder trabajar en proyectos culturales que ayuden en el desarrollo sustentable de del país. Y si sigo soñando con irme a España a estudiar gestión cultural y socioanimación cultural.
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